martes, 10 de junio de 2008

El Relato no Vende


El título de este artículo resume los comentarios que he oído en múltiples ocasiones, tanto en boca de lectores como de escritores, y expone un hecho que me ha costado asimilar ya que soy un enamorado del relato corto. He disfrutado de antologías escritas por Poe, Dahl, Bradbury, Asimov, King, David Mateo -ya hablaré de Perversa, magnífica antología de relatos- y me cuesta aceptar que esta suerte literaria no tenga aceptación entre los lectores. Pero es así y hay que adaptarse al mercado ¿O no? A fin de cuentas no deja de ser una ley de supervivencia la capacidad de adaptación. De hecho el que no se adapta, se extingue. Claro que, por otra parte, uno mira a su alrededor y encuentra que en los países anglosajones e incluso, hispanoamericanos, el relato corto no sólo sobrevive, además cuenta con una aceptación más que notable. ¿Qué ocurre en España? He tenido ocasión de recoger diversas opiniones al respecto, algunas de voces autorizadas, y resumiría las mismas en las tres parrafadas que vienen a continuación:


Al lector le gusta una buena historia que pueda seguir de un día para otro sin cambiar de tercio. Vamos que leer relatos supone cambiar de trama, personajes, ... y ese es un esfuerzo que al parecer, el lector español no asume con gusto. Por hacer un símil gastronómico: al español le gusta el plato de fabada y no tapear.

Cuando el lector madura, asume que "avanza" al dedicarse a la novela, ya que el relato le recuerda demasiado al cuento infantil.

El relato tiene consideración de "fácil", el fruto de un escritor que no se quiere calentar demasiado la cabeza.

Argumentos sobre estas opiniones tengo y ya los he expuesto en más de una ocasión, pero me gustaría abrir el debate y que fuerais vosotros los que diérais las vuestras.

En cuanto a mí, como ya dejé constancia en un artículo de sedice.com, (http://www.sedice.com/portada/index.php?q=node/235) me gusta el relato, tanto escribirlo como leerlo, y aun cuando me esfuerzo por adaptarme - a todo el que escribe le gusta ser leído- no por ello dejaré de lado un ejercicio de expresión que me satisface y motiva plenamente.

11 comentarios:

Víctor Alós dijo...

Mira que me suenan esas frases...

El caso es que disfruto como nadie de una buena novela, pero...

Tiempo, amigos, tiempo...

En esta sociedad en que vivimos, tenemos trabajo, familia, elementos de ocio para decir basta, vida social, amigos, responsabilidades... y poco tiempo para todo ello.

Un relato colma el ánsia de leer algo interesante y no te roba demasiado tiempo, que puedes dedicar a otros menesteres, como, por ejemplo, ganar dinero para pagar la hipoteca, tener comida y tal.

El relato es necesario, aunque no lo parezca, precisamente por esto: porque es un producto que se asume con rapidez y no requiere grandes dosis de atención (temporal, me refiero).

Además, si a los españoles no nos gustaran las tapas, no habrían tantos bares.

Ejem.

Un saludín

J.E. Alamo dijo...

El ejemplo de las tapas lo puse adrede, ¡Claro que nos gustan las tapas! Y tengo el convencimiento de que si le dieran una oportunidad, también gustarían los relatos. Por cierto, aprovecho para recomendar la página de Victor, un maestro en esto de las tapas...digo los relatos. ;-)

Monelle/Carmen Rosa Signes dijo...

Como persona que intenta crear cuantos más mundos mejor, o lo que es lo mismo, posible escritora de relato corto, a decir verdad, creo que es más una cuestión de modas que otra cosa. De hecho, y desde que Internet a entrado a formar parte de nuestras vidas, y por lo tanto ha aleccionado nuevas oleadas de lectores, ha quedado en evidencia que, al menos en este formato —que dicho sea de paso está en crecimiento constante—, el relato corto es lo que vende, es lo más leído. Todos los que escribimos sabemos que en el momento en el que pasas de determinado número de palabras, estás perdido y no hay quién te lea, al menos en la red. Claro está que cuando se habla de literatura, parece que todavía no se tiene considerada la red como para valorarla positivamente, y nos encontramos con que si no publicas en papel, parece que no escribas, que no eres nadie. Y es por estas cosas que prevalecen esos gustos por la novela, para los que me reafirmo en la idea de que es cuestión de gustos, y de eso hay tantos como colores. Cierto es que, si en lugar de estar aquí discutiendo este tema, publicáramos por ejemplo en Estados Unidos, las posibilidades de triunfar en este género se multiplicarían por cien, pero no por eso, no por no estar allí, debemos rendirnos, ni dejar de hacer aquello que nos gusta. Creo que, como yo, muchos escribimos por el placer que nos supone el hacerlo, así que no deberíamos rasgarnos las vestiduras al respecto por esa cuestión.

No estoy de acuerdo con ninguna de las tres afirmaciones que nos planteas Joe, es más, me parecen desfasadas y que faltan a la verdad. Nunca vi, ni sentí los relatos cortos como cuentos infantiles, pues de sobra hay en la historia de la literatura ejemplos de grandes escritores que dedicaron horas e imaginación a los relatos cortos. Ni mucho menos, se nos puede catalogar con tan baja apreciación, pues si te gusta escribir, no haces distinción ni de estilos ni de formas. Faltaría más.

Yo al menos seguiré haciendo aquello que me gusta, sin tener en cuenta este particular. Siempre hay un roto para un descosido, y el refranero popular es muy sabio.

Saludos.

Carmen

José Angel Muriel dijo...

Empecé escribiendo novela directamente. Me vi capaz, pero aún me faltaba madurez para lograr mis objetivos al respecto.

Así que me puse a escribir relatos y maduré. De pronto, me pareció que era más difícil escribir un cuento (por tanto, un reto mayor), en tanto que tenías que concentrar las ideas y el argumento en unas pocas páginas. Un buen contador de relatos debe tener cierto talento.

Por otra parte, creo que el alud editorial en que se ha convertido el mercado de los libros está beneficiando algo a las recopilaciones de relatos. Hay bastante más que hace unos años y algunas han caído en mis manos. Antes no me gustaban las antologías porque la calidad de los relatos sufría altibajos, era irregular. Ahora es más fácil encontrar buenas antologías, como, por ejemplo, la tuya, Joe.

Un abrazo.

J.E. Alamo dijo...

Carmen, coincido en todo lo que dices hasta en el desacuerdo con las opiniones que transcribo en color. Te recuerdo eso sí, que son afirmaciones que he recogido tanto en boca de escritores como de lectores. Merecen por ello consideración y un punto de reflexión. Sí que es cierto, también, que en la red se lee mucho relato corto y por ahí se vislumbra una salida.

Anónimo dijo...

Bueno yo estoy también en desacuerdo sobretodo con la tercera. Me parece que tiene más mérito hacer sentir algo al lector con un relato corto, hacerle pensar, dejarlo "mosqueado" hasta el punto de que quiera leerlo de nuevo o simplemente dejarlo pasmado , flotando. Creo que tiene más mérito cuanto más corto el relato. No por ello digo ahora que las novelas no consigan eso en nosotros y que no tengan mérito, pero mis objetivos cuando escribo un relato son todos esos y conseguirlo en pocas lineas es un duro handicap. Hacer un exámen en media hora no es lo mismo que hacerlo en dos horas, ni despegar un avión en cien metros igual de meritorio que con una pista de dos kilómetros.

En cuanto al por qué la gente no compra relatos me parece que es más bien como si se siguiera la costumbre de toda la vida. Si quieres leer pues te lees una novela, como si fuera la manera establecida. No se, en realidad no entiendo como en el tren de vida actual que premia la practicidad y la velocidad sobre la pausa y el deleite no tienen más éxito los relatos cortos que te permiten leer en cualquier momento, el metro, esperando en la consulta del médico, te permiten iniciar y dejar zanjada de una vez historias que de otro modo, al dejar en el aire, te generarían ansiedad y estres.

En fin, al final creo, que todo se reduce como ya ha dicho alguien, a una mera cuestión de gustos. En nuestras manos y plumas(bueno, teclados) está cambiar esos gustos.

Saludos a todos!

GuZ

Nelo dijo...

Conozco personas que prefieren el relato porque, por ejemplo, unos leen durante el transporte en el metro y les gusta acabar cada día una historia y otros no son grandes lectores y se cansan enseguida. Creo que el relato está desmerecido porque a cualquier conjunto de líneas le llaman relato. Pero existen verdaderas joyas, que superan con creces el exceso de páginas de muchas novelas. Yo, equiparo un buen libro de relatos a una buena novela.

Monelle/Carmen Rosa Signes dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Monelle/Carmen Rosa Signes dijo...

Creo que eso es lo que he hecho expresar mi opinión al respecto, y dejarme llevar por mi pasión por la literatura, ya sea cuento corto o novela. He llevado a mi consideración esas afirmaciones. Así como quien no quiere la cosa, llevo ya unos cuantos años (alrededor de cuatro) coordinando juegos de creación, que como base y protagonista tienen el cuento corto, y te puedo asegurar que entre todos los escritores que he conocido, afines o no al juego, no ha habido ninguno que los menosprecie, más bien todo lo contrario, pues la capacidad creadora del que se dedica constantemente a esta disciplina está en constante variación y renovación para no repetirse. A mí al menos me resultan un tanto ofensivas esas palabras:
“El relato tiene consideración de "fácil", el fruto de un escritor que no se quiere calentar demasiado la cabeza.”
Son similares a las batallas que surgen por la poesía libre con respecto a la que se basa en las normas. Más que nada encuentro ridículo que opiniones así surjan de escritores, cuando creo firmemente que todos estamos en el mismo barco. No me parece que ejerzamos ningún tipo de competencia desleal, hacia los novelistas, ensayistas,…etc., como para que se nos tilde de vagos. Invito a cualquiera de ellos a participar unas cuantas semanas de un juego en el que no se permita pasar de determinada longitud, para demostrar que están equivocados.
Como bien ha dicho guz, cuanto más corto es un texto más difícil y complicado se hace para el escritor lograr darle forma a la historia.
Espero que nadie se sienta ofendido con mis palabras, pues esa no es mi intención.

Carmen

J.E. Alamo dijo...

No sólo opiniones de escritores, como podrás constatar releyendo el texto, también delectores. En concreto esta que reseñas, es de lector y quizás refleje un error muy común al abordar el cuento/relato desde la perspectiva de la lectura. Ese es también el motivo por el que quise abrir este intercambio de opiniones. Ya digo que mi opinión la di en una columna de sedice ypor si alguien lo dudaba, es claramente favorable al relato.

J.E. Alamo dijo...

No sólo opiniones de escritores, como podrás constatar releyendo el texto, también delectores. En concreto esta que reseñas, es de lector y quizás refleje un error muy común al abordar el cuento/relato desde la perspectiva de la lectura. Ese es también el motivo por el que quise abrir este intercambio de opiniones. Ya digo que mi opinión la di en una columna de sedice ypor si alguien lo dudaba, es claramente favorable al relato.